RECORTES EN EDUCACION (I)

Nadie discute que ante la situación de crisis laboral que estamos viviendo hace falta ponerse manos a la obra y pensar. Sí, pensar, antes de actuar.

Hay que intentar racionalizar el gasto en educación.

Hay que intentar gastar menos.

Hay que ser más eficientes, esto es, lograr mejores resultados con, posiblemente, menos medios.

¿Pensar?

Sí, pesemos que es lo esencial de los procesos educativos para que los recortes que se realicen afecten lo mínimo, por no decir nada a estos procesos. Busquemos que es lo superfluo, lo ornamental de los procesos educativos, de nuestra acción educativa.

EL MUNDO TODAY

Detectemos que es suprimible, de qué podemos prescindir.

¿locales?, ¿polideportivos?, ¿ordenadores personalizados?, ¿mobilario de diseño?, ¿construcciones novedosas?, ¿sistemas informáticos de gestión de unidades didácticas,...?, ¿materiales complementarios carísimos para el uso que se les da?, ¿experimentos metodológicos dotados de ayudas y subvenciones?, ¿servicios complementarios?.

Si tenemos que adecuar los servicios, bien, pero teniendo muy claro que es lo esencial.

Bueno,... lo más prescindible para el gobierno español en el sistema educativo es el profesorado y sobre él, en exclusiva, recaen los recortes y ha decidido quitarle, por decreto, el 7,14% de sus sueldo, además del 5% que le bajó anteriormente, aumentar el ratio de alumnos por aula, intentar aumentar las horas de docencia directa,...  como medidas para racionalizar el gasto en educación.

Propongo, POR EJEMPLO, para su estudio, que replanteemos el horario en la enseñanza secundaria, para tener horario exclusivamente de mañana . ¿Qué ahorro supondría?