Fin de la primera evaluación. Se han repartido las notas. Hablemos de las notas, mejor dicho de los boletines.
En mi época de estudiante el boletín de notas era uno de los elementos más importantes en mi proceso educativo, puesto que era el vínculo que unía al centro escolar con las familias. En el boletín de notas aparecía junto a la calificación obtenida en las distintas asignatura, una valoración de mi puntualidad, orden y aseo personal además de una nota de mi comportamiento en clase, también aparecía una nota media de todas las asignaturas junto a la nota media de la clase y la posición que ocupaba en el ranking de notas de la clase, por supuesto que aparecían en rojo los suspensos así como las actitudes calificadas como pasivas.
El boletín de notas era muy importante.
Mi madre, y eso que hace casi 40 años que terminé en el colegio, aún conserva alguno de los míos y de vez en cuando lo saca para la alegría y bromas de sus nietos, mis hijos.
Se escribían a mano, con bolígrafo azul y/o rojo y estaba impreso en una cartulina en la que aparecía el membrete del colegio, su nombre y unos rectángulos en los que firmaba mi padre antes de volver a llevarlas al colegio. Un boletín para todo el curso, con su forro de plástico y mi nombre en la portada escrito con una caligrafía redondilla que rozaba la perfección.
¿No te atreves a hablar de los de hoy?
ResponderEliminarYo creo que ni progresan adecuadamente ni ná.
Ahora no existen boletines de notas, son folios en los que el ordenador escribe los resultados de las distintas asignaturas, alguna apreciación más y que da lo mismo que se entreguen doblados, arrugados, en sobre o a mano, no existe un ritual ni respeto hacia lo que significaba la "entrega de los boletines". A nosotros nos los entregaba el director del colegio en persona, iba clase por clase y felicitaba a los que lograban buenas notas, incluso regalaba regaliz, y reprendía a los que sacaban malas. Era un momento importante y el boletin un documento importante.
ResponderEliminarIgualito que hoy, que no es seguro que los padres los firmen, e incluso en algún caso no tienen sitio físico para firmarlos, ni comprobante que devolver...
ResponderEliminarPronto será digital todo. ¿Qué seguridad y qué ceremonia habrá entonces?