NORMAS

Lo llamabamos "nomas de disciplina" y eran una serie de normas generales que hacian que se tomaran medidas (castigos) cuando se rompia la normalidad en el comportamiento por parte de los alumnos. Eran normas o preceptos puestos por los profesores para el normal discurrir de las clases y de la convivencia de los alumnos etre ellos y con los profesores.

Evolucionaron y aparecieron los "derechos y los deberes de los alumnos y de los profesores" y se complicó, lo que antes era 10 o 12 normas de disciplina pasaron a ser varios folios en los que se quería democratizar la vida del centro añadiendo a las faltas leves, graves y muy graves otra serie de derechos que nunca nadie había puesto en duda y que ahora, al escribirse, hacían que tanto alumnos como profesores nos agarraramos a ellos para defender la postura que en cada momento nos podría beneficiar.
Ahora discutimos"el documento para la convivencia" una serie, más complicada y prolija de normas y "renormas" que se disponen, discuten y adoptan tras el consenso con padres y alumnos y en las que cada vez menos profesores quieren participar.

¿Tengo que consensuar las normas de funcionameinto de las clases que imparto? ¿Tengo que llegar a acuerdos con los padres y los alumnos en aspectos como el comportamiento en clase, realización de tareas, organización del aula, respeto, funcionamiento grupal, ausencias, ...? y por llegar a acuerdos no entiendo escuchar a padres y alumnos sino acordar con ellos.

Normatizar es un peligro. Un grave peligro porque en su aplicación nadie somos máquinas y variamos en la percepción de la graduación de las medidas "correctoras", de la gravedad de las "conductas inadecuadas" o en la toma de decisiones "educativas", ante un hecho concreto.

Reclamo sentido común para funcionar con un mínimo consenso que nos haga redactar las menos normas posibles  para regular la convivencia dentro del aula y del centro, normas como las hay en la sociedad, de forma explícita, y en la familia, de forma implícita. Del mismo modo, reclamo que redactemos cuales son las consecuencias de las acciones o actitudes que vayan contra el normal mantenimiento de la convivencia, que sea castigos que se atrevan a poder sufrir aquellos que no respeten las leyes de este juego que se llama convivencia.